La iniciativa piloto será implementada por SENADIS RM, en colaboración con la Universidad Semmelweis de Hungría, considera atención para 60 beneficiarios y capacitación para 30 profesionales.
El Consejo Regional Metropolitano de Santiago —en su sesión plenaria del 23 de octubre- aprobó el proyecto “Piloto en Educación Conductiva para Personas con Discapacidad en la Región Metropolitana”, por un monto total de $217.799.000.-.
La iniciativa, que será ejecutada por el Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS), consiste en la implementación de un dispositivo piloto de rehabilitación en centros de Atención Primaria de Salud (APS) de la Región Metropolitana basado en educación conductiva, con la colaboración de profesionales de la Facultad Andras Petö de la Universidad de Semmelweis de Hungría, quienes forman a “Conductores”, profesionales expertos en este tipo rehabilitación que se especializan durante cuatro años.
“Actualmente existe un convenio entre nuestra Universidad Católica y la Universidad Semmelweis para preparar profesionales chilenos en esta metodología. Nosotros en Chile trabajamos de manera muy segregada: primero una hora de kinesiología, otra de fonoaudiología, otra de terapia ocupacional, pero esta metodología que se aplica desde el año 1950 en Hungría trabajan de manera mucho más integral, porque para decirlo en fácil una persona ‘camina y habla al mismo tiempo’, por lo que tenemos que enseñar al cerebro a hacer todo integrado. Esta terapia no mejora el parkinson. Lo que hace es enseñar al cuerpo y al cerebro a controlar y volver a ser autónomo”, señaló María Ximena Rivas, directora regional de SENADIS.
Este dispositivo atenderá a 60 beneficiarios (30 niños, niñas y 30 adultos) con discapacidad de origen neurológica (parálisis cerebral, accidentes cerebro vasculares, parkinson, esclerósis múltiple, entre otros) durante seis meses, los cuales serán seleccionados desde la red de rehabilitación de la región. Para ello se contempla la habilitación de la sala de rehabilitación en un espacio en el Pequeño Cottolengo, donde se les enseñará a desarrollar una vida normal, permitiendo que la persona sea lo más autónoma e independiente posible.
Además la iniciativa contempla la participación de 30 profesionales de rehabilitación (que trabajan en Chile) como co-terapeutas, para introducirse en la metodología de educación conductiva húngara durante la estadía de seis meses. Complementariamente, dos de es estos profesionales realizarán una pasantía de 56 días en Hungría a fin de introducirse en el funcionamiento de sus centros de rehabilitación basados en esta metodología. Durante todo este proceso, se generarán registros para la sistematización de la experiencia, la cual entregará recomendaciones para la implementación de esta metodología en nuestro país a través, por ejemplo, de un diplomado.
Actualmente en Chile hay más de 2,5 millones de personas que presentan algún tipo de discapacidad. La rehabilitación general sólo alcanza al 19,1% de estas personas (y esta enfocada en cubrir las problemáticas osteomusculares), mientras que la población con discapacidad de origen neurológico llega a un 26,6% siendo patologías que requieren procesos de rehabilitación complejos, específicos y de larga duración.
Según estadística histórica de Hungría desde 1950: De cada 10 niños atendidos con este método antes de un año de vida, 8 ingresan a la Educación Regular en edad pre-escolar.
“Siempre estamos aprobando fierro y cemento, pero son pocas las veces que tenemos la oportunidad de discutir y financiar proyectos que entreguen herramientas a los profesionales de la Región. Este es un proyecto que impacta la Región”, Consejero Regional, CELIN MORENO.
“Es un gran proyecto. Es una transferencia al SENADIS, un organismo público. En general, nosotros hemos entregado hartos recursos a la Teletón y está bien, porque alguien se tiene que hacer cargo de la discapacidad. Pero a mi me alegra mucho que sea un organismo público que tome este tema con fuerza”, Consejera Regional, SOFÍA VALENZUELA.